10/02/2018, Razzmatazz 3, Barcelona. Crónica: Óscar Caselles. Fotos: Rosario López
El pasado sabado, noche de carnaval, asistimos a la presentación del nuevo disco de la jovencísima banda The Crab Apples, titulado A Drastic Mistake, en la sala Razz 3 de Barcelona. El cuarteto de Santa Eulàlia de Ronçana estuvo acompañado de la cantautora Marta Knight para abrir la velada con sus delicadas canciones de corte íntimo acompañadas de su voz y guitarra eléctrica. El aforo de la sala era una mezcla curiosa entre un público predominantemente joven y muchos familiares de mediana edad con muchas ganas de disfrutar de una noche muy especial.
Carla (guitarra/voz), Laia (guitarra), Laia (bajo/coros) y Mauro (batería) desgranaron su nuevo trabajo ayudados del talento y sabiduría del gran Lluis Cots (Madee) a los mandos de la mesa de sonido.
Desde el primer momento sorprende mucho ver a músicos tan jóvenes moverse en el escenario con esa clase, desparpajo y naturalidad. Es como si llevaran toda la vida haciéndolo. Si a esto le sumamos que sus canciones suenan compactas y delicadas a partes iguales con una pizca de sofisticación, tenemos un producto final que no tiene nada que envidiar a grandes bandas que nos llegan desde el otro lado del charco.
La preciosa voz de Carla es en gran parte artífice de esto, al moverse como pez en el agua en los diferentes registros de canciones como The End and the Begining, Flesh, Open Your Mind, Fever Look Back o el hit Redondo de Wicked Memory, entre otras. 
En Open Your Mind, por cierto, llevaron el concierto todavía más allá: junto al grupo pudimos disfrutar de la actuación de una pareja de bailarinas que nos regalaron un emocionante baile lírico. Quizá fue ese el momento cumbre de la noche, realmente lo tuvo todo.
La combinación entre la elegancia de Laia a la guitarra, la actitud más punk y enérgica de su tocaya bajista, y la solidez y constancia de Mauro a la batería nos da como resultado una banda con un gran futuro por delante. Os recomendamos seguirles la pista en su gira de este año y aprovechar la ocasión de disfrutar de su gran directo.
