Nikki Hill, 19/03/2019 Apolo[2], GuitarBCN,Promotora: The Project. texto y Fotos Mariano Antón
Se presentaba Nikki Hill con su banda en una Apolo[2] que tardó en llenarse, como parte de la programación del Guitar BCN 2019. Salida a escena fulgurante con Oh My, repleta de energía y dinamismo, con Nikki en constante movimiento y la banda despierta y dispuesta desde el primer acorde. La actitud de Nikki desde el primer minuto nos llevó a recordar a aquella imaginaria hija de Tina Turner y Little Richard que fuera criada por James Brown y Chuck Berry (Minneapolis Star-Tribune dixit) y viendo la amplitud de registros de la banda, no se puede evitar pensar en imaginar como eventuales canguros a los ZZ Top o AC/DC. Para evidenciar esta colección de influencias, cada miembro de la banda con su propia imagen: Nikki iba con el pelo en un pañuelo al estilo wrap afro, y un peto tejano que le daba una imagen mitad Rosie The Riveter, mitad heroína del rock sureño; su marido Matt Hill (guitarra) camisa hawaiana, melena y barba rubia; la guitarrista con su gorra Brian Johnson™ y la incursión de los Melvins en la camiseta del batería.
La intensidad inicial se mantuvo durante todo el primer tercio, con alguna concesión en cuanto a tempo, como la reggae Can’t Love You Back (It’s a Shame), de su reciente LP Feline Roots (Deep Fryed Records, 2018), para volver a retomar el ritmo ascendente camino del clímax con Heavy Hearts hard Fists y Might Get Killed Tonight. Se pudo disfrutar de una mezcla casi perfecta de los tres álbumes de Nikki, para finalizar el set con un bis de dos piezas, The Fire That’s in Me y Get down, Crawl.
La voz de la cantante de Carolina del Norte se acomoda camaleónica a la ingente colección de influencias, sonando nítida y potente, o bien ronca y sugerente según la ocasión lo demande, y la banda se presenta ligera de equipaje, sin cambios de instrumentos eternos ni efectismos vacíos, pero con una solidez y un desempeño sobresalientes. En tiempos de autotunes y pirotecnias varias es de agradecer la visita de músicos curtidos en los escenarios y con una propuesta musical que mira cara a cara al espectador y le grita: Are you gonna rock tonight? I said: are you gonna rock tonight?!
