18/04/2024. Die Antwoord – Razzmatazz, Barcelona. Promotora Doctor Music. Texto y Fotos: Rosario López. Tras un largo parón aparente, Die Antwoord han “vuelto a la vida” con la gira Reanimated, en que Barcelona ha sido la ciudad escogida para recibir dos noches de celebración y fiesta para el cuerpo. Anoche tuvimos la oportunidad de asistir a la primera de ellas, en un Razzmatazz sold out desde hacía meses, y la sonrisa todavía nos dura en la cara.
En pleno 2024 los gurús inspiracionales que nos animan a ser nosotros mismos como esencia de la felicidad no son nada nuevo, pero conviene recordar que mucho antes de que llegara ese mantra colectivo, Ninja y Yolandi fueron pioneros en llevarse el gato al agua en el panorama musical precisamente por el orgullo que abanderaban por su rareza. El dúo surafricano pertenecían al grupo de “los otros”: los que no tenían representación en los medios o redes sociales como ejemplo a seguir; los feístas, los arrabaleros, los kinkis con voces y acentos extraños y música políticamente incorrecta y mil-leches, y precisamente fueron esas coordenadas personales las que les valieron una conexión especial con un público que ansiaba abrazar ese descaro y autenticidad en las pistas de baile.
La de ayer en Razz fue una celebración del éxito de esa otredad. Al ser Barcelona la única ciudad escogida esta vez para su visita, fans de todos los orígenes habían acudido a esta primera cita y el ambiente festivo se palpaba mucho antes ya de que el dúo saltara sobre las tablas con Fatty Fatty Boom Boom, himno que puso a la sala a darlo todo con cadencia de rave twerking. Durante todo el show Ninja como Yolandi derrocharon química entre sí (momentazo ese beso final en la juguetona Ugly Boy) y demostraron estar muy en forma con bailes imposibles, guiños al público, el consabido crowdsurfing de Ninja y mucho, mucho flow. Los obligados parones para cambiarse de ropa (que se capearon con Ninja invitando al público a repetir palabras que les enseñaba para que luego se las cantaran a él) fueron las únicas concesiones en el ritmo frenético de un setlist en que se fue a degüello con todos los hits en el catálogo de los surafricanos uno tras otro, y que alcanzó sus mayores cotas de implicación colectiva con la electrónica abrasiva de Pitbull Terrier y Happy Go Sucky Fucky (bien de cardio) y el cachondeíto rave de Baby’s On Fire.
Aunque se podría argumentar que, de la misma manera que una explosión arrasadora no puede, por naturaleza, alargarse más de unos segundos, un concierto así de intenso no podía mantenerse arriba durante mucho tiempo, sí que cuando sonó Enter Ninja, anuncio del fin del concierto sobre la hora y cuarto de duración, algunos echamos de menos dos o tres canciones más para haberle podido poner el broche final a la noche plenamente satisfechos.
Aún así, y a pesar de que las melodías más etéreas se perdían a veces, por falta de potencia, entre un mar de graves que se imponían, el concierto cumplió expectativas: una fiesta bien a tope con la que darlo todo a las puertas del fin de semana.
Die Antwoord han vuelto y tienen mecha para rato, y viendo el rollito incombustible que se siguen trayendo entre manos, no tenemos claro si en algún momento dejaron de estar, realmente, de parranda.
GALERíA DE FOTOS (haz click en la foto para expandirla y moverte con las fechas):
yo tengo que decir que me ha parecido una tomadura de pelo de concierto, la actuación en sí duro 1 hora y por si fuera poco se tomaron un descanso entre medias de unos 10-15 minutos en el cual estuvo simplemente el Dj pinchando música.
Tenían fama de una puesta en escena maravillosa y original con juegos de luces de la cual no vi nada de eso, simplemente Ninja se tiro al público mientras cantaba, lo cual a estas alturas tampoco lo veo como una cosa fuera de lo habitual cuando vas a una sala de concierto y a ver un grupo de dicha relevancia y caracter.
6 temas que por supuesto disfrute y estaban bien, pero que menos.
Ami personalmente me parece vergonzoso ir a un concierto de 1 hora de duración, del cual estuvieron cantando 45 minutos, ya que se tomaron un descanso entre medias y encima les lavemos la imagen de que tienen fuelle para rato, yo lo que creo que necesitan dinero para rato y ya ni se molestan en dar un buen concierto.
yo como fan decepcionado y no recomiendo ir al concierto de estos caraduras, los cuales no tienen ningún respeto por su público, los cuales hemos gastado dinero por el concierto, por el transporte, el alojamiento etc para que se rían asi en nuestra cara.
un saludo y espero que esta critica le sirva a la gente para que se plantee hasta que punto deberían comprar o no la entrada.