La cantautora estadounidense Ani Di Franco ofreció ayer en la Sala Apolo un concierto previo al lanzamiento de su nuevo disco, Allergic to Water, que saldrá a la luz a mediados de octubre. Con la Sala Apolo a rebosar de público, mayoritariamente femenino, pudimos disfrutar tanto de algunos de sus greatest hits como de material nuevo de esta artista única, icono feminista y tan prolífica como cautivadora.
Saltó al escenario (literalmente) para dar comienzo a la noche, toda sonrisas, y esa fue la tónica que siguió durante todo el concierto, compartiendo su particular energía con todos los presentes, y contagiándonos su buen rollo canción a canción, acorde a acorde de sus guitarras acústicas. Y es que ayer tuvimos una oportunidad única de disfrutar ya no sólo de su música sino de su simpatía y sencillez, por ejemplo cuando comentó que era como un sueño ver a todas las bellas mujeres barcelonesas comprando y poniéndose sus camisetas (“es una sensación que ojalá todas podáis experimentar algún día”, añadió). Otro momento especial fue cuando pasó a hablarnos de la evolución del lóbulo frontal y las diferencias entre sexos, el lenguaje escrito y el estudio de los mismos en el libro The Alphabet Versus The Goddess, antes de pasar a cantar Woe Be Gone, canción inspirada por el mismo.
En definitiva, un show capaz de cautivar tanto a los y las fans de toda la vida como a los neófitos que acudieran a la sala llevados por la curiosidad, y una celebración de que los años no pasan cuando se está ante una artista de la talla de Ani.