17.03.2022 Damien Jurado + Corrina Repp. Sala Apolo. Promo: Houston Party. Texto y fotos Mariano Antón.
Tiene Damien Jurado una voz que es hogar, un lugar familiar al que volver y sentirse a resguardo, olvidar por un momento los problemas y la feroz actualidad, dejar de sentir el apremio del día a día, una voz como una abrazo cálido y prolongado, de los que duran ese poco más que los aleja de la formalidad. Con el refugio asegurado, el desarrollo del concierto se confió a un planteamiento tan sencillo como eficaz, el propio Damien a la guitarra acústica acompañado también a la guitarra por un eficaz Josh Gordon que ponía el punto justo de complejidad y sutileza, ese equilibrio tan difícil de conseguir a veces. Show de largo recorrido con sillas para todos, artistas y público, y lo que esto supone de cara a generar complicidades.
Con un sonido exquisito y nítido en el que la voz del de Seattle era protagonista, la alternancia de temas más recientes con algunos de los hits reconocibles (Qachina, Nothing Is The News, Lon Bella) conveniente adaptados al formato propuesto propiciaron que la poca frialdad entre el público (si es que alguna vez la hubo) se desvaneciera y el respetable se olvidara de estar sentado, berreos de felicidad incluidos. En los momentos de mayor euforia se arrancaron algunas palmas de acompañamiento rápida y expeditivamente cortadas con un “you are terrible drummers” que supo a gloria; apreciado lector que asistes a un concierto sin percusión, seguramente hay una razón para ello, confía en los artistas y disfruta de la atmósfera que tratan de crear.
El formato dúo acústico tiene obviamente sus limitaciones en cuanto trasferencia neta de energía, pero Damien Jurado consiguió improvisar un setlist de canciones que fue subiendo la intensidad ambiental de forma pausada pero constante para acabar en una suerte carrusel final, bis incluido. Improvisar desde el punto de vista que no había un setlist como tal si no que después de cada canción Damien buscaba en su cancionero (pulcramente plastificado) la siguiente composición y el bueno de Josh le seguía cumplidamente como el adicto a las jams que Jurado nos desveló que es.
Abrió la noche Corrina Repp, cantautora solvente que tejió a la guitarra una serie de ensoñaciones analógicas a base de sencillos loops; a destacar sus temas One Summer y Passenger, en los que estos juegos con los loops más brillaron. Tan bello como sencillo y eficaz, mereció más puntualidad por parte del respetable.
