10/10/2019 Sebadoh + Dearly Beloved. Sala Razz 2. Promo Houston Party. Texto y fotos Mariano Antón.
Pasados los 50 Lou Barlow mantiene su melena de perro de aguas y ese aspecto de chico tímido que tiene mucho que decir cuando se cuelga la guitarra, ropa sencilla y puesta en escena espartana en la que la única concesión a la parafernalia es la colección de guitarras que el de Dayton, Ohio exhibió durante el concierto, por supuesto a cada cambio los remiendos y las huellas de múltiples rasgueos eran más evidentes.
La historia es conocida, quizás la más repetida en esto del Rock: lucha de egos entre Barlow y J Mascis, el primero buscando mayor participación en las tareas compositivas, desavenencias varias que llevaron a la salida de Barlow de Dinosaur Jr (padres putativos junto con Pixies o Sonic Youth de ese no-estilo inexistente que es el indie rock) para crear Sebadoh, banda a la que en breve se añadiría Jason Loewenstein. La nueva aventura dura hasta 1999, entreverada con otros proyectos como Folk Implosion, y le siguen con posterioridad notables discos en solitario como el excelente Emoh (Merge, 2005). En 2013 la banda sorprende con Defend Yourself (Domino, 2013) al que ha continuado Act Surprised (Dangerbird, 2019).
Siendo las dos últimas referencias de la banda discos más que recomendables, a título personal el disco más importante de la banda es Bakesale (Sub Pop, 1994), año de cosecha maravillosa en el apartado de discos, con la oportuna coincidencia de llegar en la recién estrenada veintena de este autor, y la estantería de los recuerdos de edad adulta ávida de obras que dejen una impronta indelebles. Es quizás por ello que secretamente esperaba que la banda de Massachusetts se dedicara a recordar aquellos maravillosos años; afortunadamente su setlist estuvo bastante más equilibrado, dedicando una primera parte a repasar Act Surprised en la que brillaron Fool, Medicate o Sunshine, con recuerdos Defend Yourself como I Will y la agradablemente emo Beat, y un final con Careful que anticipaba un bis repleto de los hits reconocibles.
El único reproche que se les puede hacer a una banda honesta como pocas en su sonido, es que hayan tardado seis años en sacar un nuevo disco, lo retiraremos si aumentan su frecuencia de visitas a la Ciudad Condal.
Setlist:
Beauty of the Ride
Not a Friend
Soul and Fire
Celebrate the Void
Fool
Phantom
Raging River
Stunned
Follow the Breath
Act Surprised
I Will
Medicate
See-saw
Sunshine
Reykjavik
My Drugs
Beat
Got It
Careful
Encore:
Magnet’s Coil
License to Confuse
Rebound
Ocean
Skull
Brand New Love
Dentro de la cortesía que se les supone a los teloneros, es decir, no comerse al grupo principal mientras se calienta al público entrante durante el poco tiempo de que se dispone, hay grupos que buscan el límite con una salida en tromba que deja una sonrisa bobalicona al público tempranero; como tus amigos no han llegado todavía, no tienes con quién comentar lo que acabas de ver y te giras buscando miradas cómplices que te den la razón en tu descubrimiento. Como represalia, cuando lleguen los que faltaban les aseguras con la mayor de las firmezas que se han perdido el bolo del año. Dearly Beloved tuvo una de esas salidas fulgurantes, banda canadiense con ecos a unos A Place To Bury Strangers que hubieran incorporado a Kim Gordon. Si no los visteis, tengo que advertiros que os habéis perdido uno de los bolos del año.